
Por ráfagas de vientos superiores a 100 km/h un avión no pudo aterrizar en Neuquén
Las fuertes ráfagas imposibilitaron que la aeronave pueda llevar adelante un arribo seguro en esa ciudad por lo que tuvieron que desviar su ruta hacia Mendoza.
Una maniobra de película fue registrada este domingo en el aeropuerto neuquino Juan Domingo Perón, luego de que un avión operado por JetSmart no logró aterrizar en la pista, debido a las fuertes ráfagas de viento que azotan la ciudad. “Pegamos contra la pista y terminamos en Mendoza”, describió una pasajera.
Este clima, con ráfagas de más de 100 kilómetros por hora, provocó que el vuelo se extienda por casi seis horas. “El viaje fue horrible, interminable y lleno de incertidumbre”, relató la mujer, Juliana Oses, en diálogo con medios neuquinos.
La interrupción en el normal funcionamiento del aeropuerto provocó que el piloto del avión tuviera que realizar una maniobra sorprendente, ya que al intentar descender sin éxito tocó la pista de aterrizaje con sus ruedas pero inmediatamente volvió a elevarse en direccion norte hacia Mendoza
Alrededor de las 18hs el vuelo partió nuevamente hacia Neuquén: “Fue una hora más, llena de miedo y de turbulencia. Intentábamos estar todos tranquilos, pero había una cierta tensión. Estábamos todos expectantes mientras el avión se seguía moviendo porque la turbulencia no cesaba“, explicó.
A diferencia del primer intento de aterrizaje, según narró la pasajera, está vez sí se podía ver la pista, lo que la dejó más tranquila ya que “en el primer intento no se veía nada” y describió la situación “como si el avión hubiera entrado en una nube de polvo” antes de pegar contra el suelo.